Informe Limiths to Growth fue el documento que desató la discusión sobre la relación entre el uso de los recursos naturales y el futuro de la humanidad. En el mismo año (1972), la Organización de las Naciones Unidas celebró la Primera Cumbre de la Tierra 1, en Estocolmo, Suecia, donde los participantes acordaron que:
The protection and improvement of the human environment is a major issue which affects the well-being of people and economic development throughout the world; it is the urgent desire of the people of the whole world and the duty of all governments.
La Declaración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano
Esta declaración contiene recomendaciones para la acción medioambiental a escala internacional, como resultado de las preocupaciones por la contaminación de los mares provocada por los barcos. También aborda el problema de los vertederos submarinos, así como la extinción y el comercio de especies marinas. En 1973, justo después de esta Cumbre y de la publicación del informe mencionado, tuvo lugar el primer conflicto energético global. Sin embargo, en las exportaciones de petróleo por parte de los países productores de Medio Oriente, como respuesta al apoyo occidental a Israel, provocó la crisis económica mundial más grave desde la II Guerra Mundial. Tan solo seis años después (1979) surgió la segunda crisis de energía, esta vez como consecuencia de la revolución iraní. Dichos acontecimientos mostraron la fragilidad del sistema económico global, basado en la dependencia de la explotación del petróleo, recurso natural finito y no renovable.
A pesar de varias situaciones de alto riesgo ambiental como los derrames de petróleo en las plataformas Ixtoc I en 1979 (México), en la de Nowruz en 1983 (Irán) y en la de Exxon Valdez en 1989 (Alaska); la explosión de un reactor nuclear en Chernóbil, Ucrania, en 1986 o la contaminación del río Rin en el mismo año, en Suiza, la definición de desarrollo sostenible surge hasta el año 1987, con el informe Our Common Future. 2
Sustainable development is development that meets the needs of the present without compromising the ability of future generations to meet their own needs.
Our Common Future
Por otra parte, el documento conocido —por el apellido de su principal impulsora— como Informe Brundtland, fue considerado por sus creadores como el programa global para el cambio y se concentró en un periodo que comprendía desde el año de su publicación hasta el 2000. En él se realizó
una revisión de los aspectos críticos del desarrollo y se propusieron objetivos comunes que pudieran guiar la cooperación internacional enfocada en los cambios necesarios para garantizar el futuro de la humanidad. El informe presentó un punto de vista holístico, que tomaba en cuenta las interrelaciones entre personas, elementos del medioambiente y el desarrollo económico en la consecución del bienestar. El prólogo de este documento trata sobre la importancia de los factores sociales y económicos que se deberían considerar para poder proteger los recursos naturales.
La comisión, formada por la doctora Brundtland, hizo hincapié en la necesidad de un enfoque tanto social como ambiental del desarrollo sostenible, donde un lazo inseparable unía la protección del medioambiente y los recursos naturales con las necesidades y prioridades de las personas. Los autores concluyeron que era necesaria la redefinición del crecimiento económico, tomando en consideración los factores sociales y medioambientales.
When the terms of reference of our Commission were originally being discussed in 1982, there were those who wanted its considerations to be limited to “environmental issues” only. This would have been a grave mistake. The environment does not exist as a sphere separate from human actions, ambitions, and needs, and attempts to defend it in isolation from human concerns have given the very word “environment” a connotation of naivety in some political circles. 3
Gro Harlem Brundtland
En 1992, la urgencia por adoptar medidas internacionales más contundentes respecto al cuidado del medio ambiente llevó a convocar, en Río de Janeiro, Brasil, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo o Cumbre para la Tierra, como también se la conoce. En esta se estableció un nuevo marco para los acuerdos internacionales, con el objetivo de proteger la integridad del medio ambiente a nivel mundial: la Declaración de Río y el Programa 21 proponían un consenso mundial sobre cooperación en materia de desarrollo sostenible y medioambiente. En el evento, el profesor M. Munasinghe presentó su trabajo Environmental Economics and Sustainable Development, en el que planteó un modelo triangular de desarrollo sostenible. Según este autor, el desarrollo sostenible requería de un balance y de un análisis integrador desde los aspectos económico, social y ambiental.
The economic approach to sustainability is based on the Hicks-Lindahl concept of optimality and economic efficiency applied to the use of scarce resources. […] The ecological view of sustainable development focuses on the stability of biological and physical systems. The socio-cultural concept of sustainability seeks to maintain the stability of social and cultural systems, including the reduction of destructive conflicts. 4
Mohan Munashinghe
Estas propuestas formaron las bases para lo que actualmente se reconoce como «economía ambiental», que estudia los efectos económicos de las políticas ambientales, nacionales o locales, incluyendo costos y beneficios, para disminuir la contaminación del aire, agua, generación de residuos y el calentamiento global. Además, esta idea estableció los fundamentos a la tendencia de la eco-eficiencia en diseño de productos y servicios, a la que se hará referencia más adelante.
En este contexto, quedaba explícito un incremento de las propuestas legislativas en pro del medio ambiente, que imponían a las industrias la implementación de nuevos estándares y protocolos de producción. Dado que esta definición del desarrollo sostenible afirma que la dimensión económica se orienta hacia la mejora del bienestar humano, principalmente a través del aumento en el consumo de bienes y servicios, fue difundida y adaptada por el mundo empresarial, bajo el concepto de Triple Bottom Line (Triple Resultado).
Sin embargo, dicha perspectiva, aunque tiene en cuenta la responsabilidad social y ambiental como un elemento del desarrollo sostenible, mantiene el paradigma del crecimiento económico capitalista como el camino más adecuado para la definición del futuro humano.